CITEREA

Quién eres tú bella moza,
capullo de primavera,
que ni el frío del invierno
me impide que yo te vea.

Qué viento rizó tu pelo,
qué artista pintó tus cejas
y puso el rostro de un ángel
en tu cara de princesa.

Qué diosa te habrá prestado
ese tu cutis de seda
y esos ojos tan hermosos
con brillo de las estrellas.

Tus manos son dos palomas
que al aire revolotean
y van formando arabescos
como una sutil estela.

En el cáliz de tu boca
quiero beber agua fresca,
libar tus labios dormidos
con dulce miel de colmena.

Las curvas de tu cintura
enlazan fina cadera,
que sin querer aceptarlo
mis manos vuelven traviesas.

Vas altiva con tus pasos
dibujando la vereda
y tú perfume de rosas
queda flotando en la yerba.

¿Quién fue que te dió la vida?
¿Quién la bendita cigueña
que te trajo desde el cielo
para reinar en la tierra?

Mujer que naciste al mundo
cual mariposa coqueta,
quisiera ser una araña
para envolverte en mi tela.

Así tenerte en mis brazos
pura y grácil citerea,
dormir contigo las noches,
besarte cuando amanezca.

Autoría y Voz de: Luis Lema Osores ®L3mos

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